domingo, 27 de marzo de 2016

Una Ética para la Sustentabilidad1, no para la sostenibilidad


1. La crisis ambiental es la crisis de un modelo económico, tecnológico y cultural que ha depredado la naturaleza y negado la diversidad cultural. Como resultado de una visión mecanicista del mundo que ignora los límites biofísicos de la naturaleza y los estilos de vida de las diferentes culturas. La crisis ambiental es una crisis social que desemboca en una crisis ecológica que acelera el calentamiento global del planeta y nos acerca a la autodestrucción. Este es un hecho antrópico y no natural.
2. El concepto de Sustentabilidad se basa en el reconocimiento de los límites y de las potencialidades de la naturaleza. El concepto de Sustentabilidad promueve una nueva alianza naturaleza-cultura fundando una nueva economía (más bien Ecosimía), reorientando los potenciales de la ciencia y la tecnología hacia el Sustento de los seres vivos promoviendo los Recursos renovables del planeta y construyendo una nueva cultura política fundada en una ética que garantice, en valores, creencias, sentimientos y saberes, las formas de habitar el planeta Tierra.
3 El discurso de la "sostenibilidad" parte de una idea equívoca, pues pretende realizar sus objetivos “sosteniendo” el mito desarrollista, promoviendo la falacia de un crecimiento económico sostenible sobre la naturaleza limitada del planeta. Los principios del desarrollo sostenible parten del pensamiento unicista que tiene la percepción del mundo como "una sola tierra" con un "futuro común" para la humanidad; orientan la nueva geopolítica en los que pueden "pensar globalmente y actuar localmente". Hasta la Cumbre de Río en 1992 se coincidía en el "principio de precaución" para conservar la vida ante la falta de certezas del conocimiento científico y el exceso de imperativos tecnológicos y económicos; Se pretendía promover la responsabilidad colectiva, la equidad social, la justicia ambiental y la calidad de vida de las generaciones presentes y futuras. Sin embargo, estos preceptos, impulsados desde los países desarrollados y traducidos en el concepto del "desarrollo sostenible", desde su difusión en la Cumbre de Río, no se han traducido en una ética que reoriente los procesos económicos y políticos hacia un nuevo reconocimiento social y hacia formas que garanticen el Sustento en la producción y de vida.
4. La Ética para la Sustentabilidad promueve la gestión participativa de los bienes y servicios ambientales de la humanidad para el bien común; la coexistencia de derechos colectivos e individuales; la satisfacción de necesidades básicas, realizaciones personales y aspiraciones culturales de los diferentes grupos sociales.
La ética se tiene que transmutar en una ética política basada en la Biodiversidad, en todos los ámbitos. En la dicotomía entre la razón pura y la razón práctica, de la disyuntiva entre el interés y los valores, la sociedad necesita desplazarse hacia una economía de conocimiento ético que inspire a la Equidad entre los seres humanos y estos con la naturaleza. La Ética para la Sustentabilidad plantea la necesaria reconciliación entre la razón y la conciencia, de manera que los seres humanos alcancemos un nuevo estadio de autonomía y control sobre nuestros modos de vida, haciéndonos responsables de nuestros actos, sea hacia sí, hacia los demás y hacia la naturaleza en la perspectiva de lo que beneficia a la humanidad y lo que no. La Ética para la Sustentabilidad es la ética de la diversidad donde se conjuga el ethos2 de diversas culturas. Es una ética radical porque va a la raíz de la crisis ambiental para remover todos los cimientos filosóficos, culturales, políticos y sociales de esta civilización hegemónica, homogeneizante, jerárquica, despilfarradora, sojuzgadora y excluyente. Es una ética para el re_encantamiento y la re_erotización del mundo, donde el deseo de vivir reafirma el poder de la imaginación, la creatividad y la capacidad del ser humano para transgredir irracionalidades represivas, para indagar por lo desconocido, para pensar lo impensado, para construir el porvenir de una sociedad convivencial y sustentable y para avanzar hacia estilos de vida inspirados en la frugalidad, el pluralismo y la armonía en la diversidad. La Ética para la Sustentabilidad aporta una nueva filosofía capaz de comprender las complejas interacciones entre la sociedad y la naturaleza. La interrelación y la interdependencia enlaza los vínculos indisolubles de un mundo interconectado de procesos ecológicos, culturales, tecnológicos, económicos y sociales. Cambia la percepción del mundo basada en un pensamiento único y unidimensional, por un pensamiento de la complejidad. La Ética para la Sustentabilidad se nutre de un conjunto de preceptos, principios y propuestas para reorientar los comportamientos individuales y colectivos, así como las acciones públicas y privadas orientadas hacia la Sustentabilidad.
1Los países del Tercer mundo necesitan Sustentarse. Los países ricos quieren sostenerse.
2 Conjunto de rasgos y modos de comportamiento que conforman el carácter o la identidad de una persona o una comunidad